Tenedor libre

Estaba la basura ahì, con las palomas y todo era horrible...

_ Ja, vos porque no sos hombre. ¡Te confundiste un pantalòn humano con uno de mujer! _ Pero si te dije, de hecho te lo dije mil veces derecho: Mientras no lo toques con la mano, con el pie lo podès hasta destrozar a tu gusto...

_ uuuuuu Chauuu, no lo voy a tomar al otro, porque camino menos hombres yo.
_¿Còmo es el auto de su padre? Decime.. porque segùn el modelo, depende la dieta y el zapato a estrenar.. vos pensà como si fueran senos sin frenos.
_ Es que piensopienso y no encuentro el tamaño de su cuerpo y motor, solo sè que usa un pantalòn extrangulado relleno de cesos de idiotas que no supieron morir sin deshacerse bajo un zapato mayor. Estas cuestiones de la carne a la carta...

_¡A comer entonces mija! Que algùn dìa sabrà su talla, usted piense, que las palomas eran testigos fuleros de su taco aguja, esta vez no diràn nada.. pero vamos por favor señorita dìgame de una buena vez:¿Dònde queda el lavadero de ropa virtual?

La chica, ensordecìa a la mujer por aquellos gritos estupendos provenientes de quienes sacaba de su boca. Se trataba de una serie de hombrecitos mañatados bañados en sangre de distintas salsas que simulaban ser los coloridos pañuelitos utilizados por los amantes de la magia. Ella con gran habilidad realizaba su desfile y con su mano libre señalaba velozmente la puerta del gran electrodomèstico, los tenedores mientras tanto festejaban en caìda libre desde el balcòn, porque todavìa... se cree que las palomas son mudas.